domingo, 12 de diciembre de 2010

Stay

Te extraño.

¿Recuerdas, cuando dijimos que nuestra historia seria un para siempre? Creo que ninguna lo recordrmos cuando aquel día nos dijimos adiós. Si, fue un para siempre, fue un adiós definitivo...para siempre.

Me cuesta pensar que paso mucho tiempo desde la ultima vez que cruzamos una simple palabra, que nos abrazamos.

Pero asimilar que ya no habrán ni palabras, ni abrazos, ni miradas es el camino mas duro, es la prueba de un destino que se empeña en destrozarme el alma.

Hubo un tiempo en el que creí que te había perdido. Ahora, no lo creo, ahora se que te perdí.

Que puedo decirte, creo que si pudiera volver a verte me conformaría con abrazarte y saber, que aunque yo ya no formo parte de tu vida, eres feliz. Que la vida te sonríe y te abraza por mi, que te hace feliz...por mi. Solo me queda pensar que de vez en cuando, detienes al mundo y malgastas un poco de tu preciado tiempo en acordarte de mi, de aquella persona que una vez reino en tu vida.

Me gustaría que supieras que aunque pase el tiempo, tu recuerdo siempre me hará sonreír. Y que esa foto que esta encima de mi escritorio jamas se moverá, porque fuistes y siempre seras mi amiga, mi confidente, mi roca en la que apoyarme. Me hicistes ser mejor persona, me ayudastes a crecer y a levantarme cuando mas lo necesitaba. Para mi eso cuenta mas que aquel adiós.


Y dijimos un para siempre...