¿Alguna vez has sentido esa extraña sensacion?
La sensacion de que los sentimientos estan colgando de una cuerda... Una cuerda debil, casi rota. Realmente rota.
Sentirte casi al borde de un precipicio, esperando el momento de caer y romperte en pequeños cristales teñidos de tristeza.
Si, yo tambien la he sentido.
Cuando tu corazon aulla de dolor, pero el mundo parece ageno a ti. Te miran y ven lo que esperan, las comisuras de tu boca elevadas, dando la sensacion de esa irreal sonrisa. Y al verla apartan la cara, porque ya han visto lo que querian ver. ¿Todavia no te distes cuenta de que a nadie le importa que pidas a gritos un poco de consuelo?
Crees aprender la leccion, pero aun vuelves a mirar, esperando que esta vez si importe, esperanzada. Esperando que alguien te abraze para que no saltes.
El precipicio te espera. Salta. Adios pequeña alma.
¿Sabes?
Un dia te cansaras de levantar tu mirada y esperar lo imposible.
Ese dia aprenderas una gran leccion.
Una leccion en la que la soledad y el dolor van cogidos de la mano...Grandes y viejos amigos.
Te juro que un dia, aprenderas a quererlos.
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